El director del Chile Documentation Project del National Archive, de la Universidad George Washington, Peter Kornbluh presentó este miércoles más de 20 mil documentos desclasificados que confirman que Estados Unidos intervino en el golpe de Estado contra el presidente chileno Salvador Allende en 1973.
Los textos son un conjunto de bases de datos donados al Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, en Santiago de Chile, reseñó la multiestatal Telesur.
Entre los archivos se constata que el dictador Augusto Pinochet chileno rechazó en los años 80 un documento en el que los Carabineros (policía de Chile) se responsabilizaba por el asesinato de dos jóvenes.
También se hallan textos sobre los planes para llevar a cabo un derramamiento de sangre, después de presentarse el plebiscito en el año 1988, junto a transcripciones de conversaciones del entonces secretario de Estado norteamericano Henry Kissinger.
Kornbluh afirmó que el ex funcionario estadounidense “era el arquitecto del programa que intentó derrocar a Allende entre 1970 y 1973”.
En 1976, Pinochet y Kissinger sostuvieron una conversación en la que este último respaldó la dictadura diciendo que “deseamos que el suyo sea un Gobierno próspero. Queremos ayudarle y no obstruir su labor”.
El entonces secretario de Estado insistió, en su diálogo con Pinochet, que éste estaba “siendo víctima de todos los grupos de izquierda del mundo y su mayor pecado no ha sido otro que el de derrocar un Gobierno que se convierte al comunismo”.
Kornbluh aseguró que el Secretario del presidente Richard Nixon “era la persona más responsable de ayudar económica y militarmente a Pinochet a consolidar su régimen”.
Explicó también que existe más información oficial sobre la dictadura chilena que se encuentra escondida.
De los casi 24 mil documentos entregados, un total de 2.000 son de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por su sigla en inglés), que desde 1971 presionó para que se concretara el golpe de Estado.
El material desclasificado además hay transcripciones entre Pinochet y el ex jefe de la policía secreta (DINA), Manuel Conteras, donde pretendían mentir sobre el asesinato del ex canciller Orlando Letelier, víctima de un atentado cometido en Washington en septiembre del 76.
Kornbluh explicó que los documentos podrían contribuir a esclarecer los procesos judiciales abiertos actualmente sobre crímenes de lesa humanidad cometidos durante la dictadura.
“Estos documentos deben contribuir a darnos poder y a ayudar a hacer avanzar la justicia y la dignidad en Chile”, sostuvo.
La dictadura encabezada por Pinochet se extendió en Chile entre 1973 y 1990, y tuvo como saldo el asesinato de 3.000 personas y miles de presos políticos.
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